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Veterinaria apuesta por integrar la sanidad animal y la salud pública

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El curso de verano celebrado en la Facultad de Veterinaria aboga por la filosofía “una sola medicina, una sola salud” para afrontar las distintas enfermedades

 

12/07/2014. El profesor de la Universidad de Extremadura, David Reina, junto al profesor de la Universidad Complutense, Lucas Domínguez, dirigen el curso de verano “Actualización en enfermedades humanas y animales producidas por microorganismos y parásitos”, organizado por el Vicerrectorado de Extensión Universitaria.

El seminario se ha celebrado con el objetivo de ofrecer a los profesionales del área de la Salud y los estudiantes de Grado una visión global sobre las zoonosis (enfermedades humanas de origen animal) de mayor relevancia en España, tanto en Salud Pública como en Sanidad Animal, bajo la actual filosofía “una sola medicina, una sola salud”. El estudio de las distintas enfermedades se ha abordado desde un enfoque integrador que ha incluido aspectos como su epidemiología, los riesgos en Salud Pública, las medidas de control o las respuestas ante posibles brotes.

El curso ha incidido sobre aquellas zoonosis que en la actualidad tienen mayor relevancia para la Salud Pública, bien por su alta incidencia, sus posibles consecuencias para la salud en el ser humano o su dificultad de control, tales como la tuberculosis, la leishmaniosis o la enfermedad del Nilo Occidental.

El programa ha mostrado cuáles son las principales patologías que sufren los animales domésticos y de renta, ya que las zoonosis se caracterizan por estar asociadas a una determinada especie o grupo de especies y pueden ser muy diferentes según el tipo de animal.

En el caso de los animales de renta, el tipo de producción determinará que patógenos pueden desarrollarse con mayor frecuencia y ser transmitidos al hombre. “Por este motivo, en lo que respecta a cada tipo de animal y a cada uso de los mismos (mascotas, recreativo, cinegético, de producción, etc.), el control de zoonosis ha de enfocarse hacia enfermedades concretas según corresponda” explican los directores del curso.

Zoonosis actuales

En el último año, por su virulencia, han destacado principalmente dos zoonosis: la tuberculosis y la leishmaniosis. A pesar de los esfuerzos llevados a cabo tanto por la Administración y sus centros colaboradores, como por los veterinarios clínicos en las campañas de saneamiento, a través de la aplicación del Plan Nacional de Erradicación de la Tuberculosis, los niveles de prevalencia de la enfermedad han continuado siendo altos. Destacan regiones como Extremadura o Madrid, donde se han detectado focos en fauna salvaje, situación que dificulta aún más su control, “hecho que pone de manifiesto la necesidad de seguir invirtiendo esfuerzos en la mejora y la correcta aplicación de las medidas de erradicación de esta zoonosis” inciden los profesores Reina y Domínguez.

La leishmaniosis es una enfermedad de elevada prevalencia en la población canina de gran parte de España y que, en los últimos años, ha aumentado exponencialmente en personas de la Comunidad de Madrid debido a un brote asociado a las liebres como reservorio.

La presencia de estas dos enfermedades en Extremadura también es alta. La región se perfila como la cuarta comunidad autónoma con mayor prevalencia de tuberculosis en España, pese a que está sometida a un estricto control por las autoridades sanitarias y por los Planes de Erradicación a nivel nacional.

No obstante, los directores recuerdan que “son muchas otras las zoonosis que, si bien actualmente no tienen una alta prevalencia en nuestro país, es fundamental su estudio con el fin de que los profesionales de la Salud Pública dispongan de las herramientas suficientes para su lucha por si se produce un aumento de los casos en un futuro”.

Recomendaciones

El control y erradicación de las enfermedades zoonósicas se apoya principalmente en dos tipos de medidas. Por un lado, aquellas destinadas a eliminar la presencia de la enfermedad en el reservorio mediante, por ejemplo, la puesta a punto de Planes de Control y Erradicación (como en el caso de la tuberculosis o la brucelosis); la realización de Controles Oficiales (como los realizados para la detección de la triquinelosis y la hidatidosis) o las campañas de desparasitación y vacunación de animales domésticos (por ejemplo, la vacuna antirrábica o la desparasitación frente a Equinococcus).

Por otro lado, se encuentran las medidas destinadas a la lucha contra los vectores transmisores de la enfermedad para impedir el desarrollo del ciclo biológico completo del patógeno, como es el caso de la leishmaniosis o la Enfermedad del Nilo Occidental.