Un seminario aborda los recursos territoriales para el desarrollo rural

27/04/2009. El seminario sobre Recursos Territoriales para el Desarrollo Rural, actividad formativa dentro del Máster Oficial en el Desarrollo Rural de la Universidad de Extremadura, trata de completar la formación de los futuros profesionales que se preparan para trabajar en y para el mundo rural. Se celebra hasta el miércoles 29 de abril en la Facultad de Filosofía y Letras.

Las jornadas, coordinadas por los profesores Antonio Pérez Díaz y Felipe Leco Berrocal, buscan difundir entre los universitarios extremeños algunos de los múltiples aspectos que necesariamente han de considerarse para planificar y lograr el desarrollo de los espacios rurales. Antonio Pérez explica que “se abordan aspectos relacionados con el patrimonio rural, el medio ambiente, la agricultura, el turismo, los paisajes agrarios, entre otros”. Añade que la actual crisis “sirve para cuestionar el dorado urbano y pensar en lo rural”.

Se han inscrito en el Seminario 75 alumnos que pertenecen a titulaciones tan diversas como Geografía, Turismo, Derecho, Ciencias Ambientales, Humanidades e Historia del Arte. A ellos, debe sumarse la presencia de técnicos de grupos de diversos Centros de Desarrollo Rural y otros gestores relacionados con este ámbito. En total, participan más de 100 personas.

En el acto inaugural, presidido por el decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Luis Merino, han participado el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, Eduardo Alvarado, el presidente de la Red Nacional de Desarrollo Rural, Aurelio García, y el director general de Desarrollo Sostenible del Medio Rural (MMARM), Jesús Casas Grande, que ha impartido la conferencia inaugural titulada Ley para el desarrollo sostenible del medio rural.

Durante la ponencia, Casas ha señalado que la agricultura va a seguir siendo una fuerza determinante en el mundo rural, pero que no se puede pensar que el futuro pase exclusivamente por la actividad agraria, “la agricultura en estos momentos es importante desde el punto de vista económico y paisajístico, pero desde el punto de vista social ya no tanto, hay mucha gente en el mundo rural que no trabaja en la agricultura. En consecuencia, la perspectiva para asegurar el futuro al mundo rural tiene que ser más transversal, más territorial y que tenga en cuenta otros sectores”.

En segundo lugar, apunta el director general, a pesar de la mejora que ha vivido el mundo rural en las últimas décadas, lo cierto es que todavía sigue perdiendo población, y a veces porque emigra a ciudades donde incluso las posibilidades de trabajo son menores, “eso significa que no es atractivo el campo y no lo es porque el nivel de servicios y el nivel de calidad de vida es inferior”. La solución consistiría en conseguir una igualación de servicios, es decir, que la gente que viva en el mundo rural tenga la misma capacidad de vida que la gente que resida en el ámbito urbano.