Discurso del Excmo. y Magnífico. Sr. Rector

Excma. SeñoraConsejera de Educación y Empleo

Excma. Señora Delegada del Gobierno en Extremadura

Señores miembros del Consejo de Dirección de la UEx

Señores anteriores Rectores de la UEx

Excmas. E Ilustrísimas autoridades

Amigos y amigas de la comunidad universitaria

Señoras y Señores:

El pasado 16 de diciembre el Congreso de los Diputados aprobó una proposición no de ley mediante la cual instó al gobierno a “elaborar y coordinar una estrategia española para la educación superior, potenciando los esfuerzos de los departamentos ministeriales, las comunidades autónomas, las universidades y todas las instituciones y agentes participantes en la consecución de los objetivos de formación, generación y transferencia de conocimientos en beneficio de la ciudadanía y el desarrollo y mejora económica de nuestro país”.

Resulta gratificante comprobar como una parte importante de las ideas que venimos defendiendo en las universidades son asumidas e incluidas dentro de esta estrategia. La garantía de la suficiencia financiera, la internacionalización, establecer una carrera académica e investigadora previsible, reconociendo los méritos y capacidades de los profesores universitarios mediante la elaboración de un estatuto del personal docente e investigador, garantizar y mejorar un modelo de becas y ayudas al estudio y aumentar la presencia de la sociedad en las  instituciones de educación superior y de éstas en la sociedad son algunas de las ideas principales que vertebran esta apuesta.

Agradecemos al profesor Antonio Vicente Sempere Navarro su tiempo y su magnífica conferencia. El profesor Sempere se licenció en Derecho por la Universidad de Murcia en el año 1977. Ha sido Catedrático en las universidades de Oviedo, Murcia y Rey Juan Carlos. Ha compaginado su actividad docente e investigadora con otras actividades relacionadas con la jurisdicción social. Los que le conocen bien destacan las dotes que le caracterizan: es un docente relevante dotado de la habilidad para diseccionar los temas complejos y exponerlos de una manera sencilla y un infatigable investigador. Antonio Sempere es un jurista de reconocida competencia, por eso fue designado por el Consejo General del Poder Judicial magistrado de la sala Social del Tribunal Supremo. Todas estas actividades las lleva a cabo en un marco de sencillez y humildad, características propias de los grandes. Gracias Profesor por su trabajo y su compromiso con la Universidad de Extremadura.

Año tras año la UEx distingue a sus mejores estudiantes. De esta forma sencilla reconocemos la capacidad y el trabajo de alumnos distinguidos, con los premios al mejor expediente académico y los premios extraordinarios de doctorado. La areté–excelencia‐ era uno de los conceptos cruciales de la Antigua Grecia. En su forma más general, para algunos sofistas la areté es la excelencia o prominencia en el cultivo  de la elocuencia; la raíz etimológica del término es la misma que la de aristós –mejor‐ que designa el cumplimiento de un propósito o una función. La adquisición de la areté era el eje de la educación del joven griego, siguiendo el ideal expuesto por Isócrates. Recibid nuestra más sincera felicitación que hacemos extensiva a vuestras familias y amigos. No perdáis nunca la tensión, el esfuerzo y la constancia que habéis demostrado. De poco serviría lo alcanzado si –de cualquiera de las muchas formas posibles‐ no ponéis en práctica vuestros conocimientos.

Con la distinción de la Excelencia Docente y de la trayectoria Docente de Excelencia reconocemos a los profesores que dejan huella en nuestros estudiantes. Ellos consiguen que la gratificante tarea de la transmisión del conocimiento encuentre sentido formando a ciudadanos comprometidos, cultos y solidarios. Muchas gracias a todos por vuestro ejemplo y vuestro trabajo.

La segunda misión universitaria –la investigación o generación del conocimiento - ha sido asumida por las universidades de nuestro país de forma clara. En nuestros días la producción científica que se realiza en las universidades españolas representa dos tercios de la producción científica total de España –más del 90% en el caso de Extremadura-. Llama la atención que nos situemos como una potencia científica mundial a pesar de los escasos recursos que invertimos en I+D. Sin duda la dedicación, la entrega, la profesionalidad y la vocación muy acrisolada de los investigadores universitarios explican esta situación de privilegio. Reconocer la dedicación  y los resultados de los mejores es de justicia y necesario para inculcar que la investigación es uno de los derechos y las obligaciones que tenemos los profesores. Recibid nuestra enhorabuena y el reconocimiento de toda la sociedad por vuestro esfuerzo callado y por conseguir la excelencia en esta importante tarea. Os necesitamos cada día más. Necesitamos que aumentéis vuestra dedicación a la investigación y, si es posible, a la transferencia de algunos de sus resultados. Cambiar el tejido productivo con la creación de empresas, productos y servicios basados en el conocimiento es esencial para construir una sociedad en la que participemos y quepamos todos. El próximo año convocaremos, además, el premio a la transferencia de conocimientos a la sociedad para destacar a los compañeros más comprometidos en esta tarea.

Nuestra Universidad reconoce el trabajo de las mujeres y los hombres que han superado los 20 años en la institución. Sin vuestro esfuerzo la UEx no podría cumplir con sus obligaciones ni prestar sus servicios. Os damos las gracias por formar parte de esta Universidad y os animamos a que sigáis aportando vuestros conocimientos, ilusión y experiencia.

De nuevo reconocemos el compromiso de las personas recién jubiladas. Estoy convencido de que no nos olvidaréis y nos seguiréis apoyando en la medida de vuestras posibilidades. Seguimos necesitando de vuestra ayuda y consejos. Os deseamos una feliz  jubilación a la vez que comprobéis el progreso de la Institución y la sociedad a la que habéis servido y os sintáis orgullosos de ellas.

En este capítulo de agradecimientos no me quiero olvidad del coro de la UEx, al que felicito por su extraordinaria actuación.

Somos conscientes del esfuerzo que hace la Junta de Extremadura al financiar a la universidad de nuestra tierra, lo agradecemos públicamente. Hace unos días le comenté al Presidente la necesidad de desarrollar y poner en funcionamiento de forma eficaz la ley de financiación –aprobada por unanimidad en la Asamblea‐ para garantizar nuestra sostenibilidad y permitir nuestro progreso. Esta petición la extendimos a los diferentes partidos y la comunicaremos a los agentes sociales. Dicha norma “tiene por objeto la regulación de un marco estable de financiación para la Universidad de Extremadura, suficiente para asegurar el funcionamiento de calidad en los ámbitos de la docencia y la investigación, facilitando la transferencia a la sociedad extremeña de los resultados generados por la Universidad”. Queda claro el espíritu de la ley y nos toca ponerle números a ese espíritu en la línea de lo conseguido por otras universidades públicas de nuestro país. En la mayoría de los casos se está acordando la financiación por las comunidades autónomas de la totalidad del capítulo de gastos del personal. Con voluntad podemos alcanzar este objetivo si planificamos a tres o cuatro años. Las justas reivindicaciones de profesores, investigadores, personal de administración y servicios y estudiantes no las podremos atender sin su correcto desarrollo. Reclamamos que este documento sea una herramienta eficaz y no se quede en papel mojado. Es un trabajo que nos compete a todos y en el que todos somos responsables. Nos jugamos el futuro de nuestra universidad y un a forma de entender las enseñanzas universitarias basada en la igualdad de oportunidades y en la seriedad, sin atajos y sin engaños.

Desde CRUE Universidades españolas pedimos al ministerio la eliminación de la tasa de reposición en las universidades para que éstas, sobre la base de no pasar su techo de gasto ni de generar déficit, tengan la autonomía necesaria para contratar en función de sus necesidades reales. Desbloquear esta situación debe servir para evitar la situación de precariedad en la que se encuentran muchos profesores con contrato laboral, así como permitir la promoción de los profesores ya acreditados. Si queremos evitar la fuga del talento y retener a los mejores debemos facilitar su carrera docente e investigadora. Todos debemos comprometernos en esta noble tarea.

En el mismo sentido, trabajaremos para continuar con la estabilización laboral de los compañeros del personal de administración y servicios. Dicha estabilidad unida a la profesionalización de los servicios universitarios garantiza el normal funcionamiento de nuestra institución.

No podemos desaprovechar la oportunidad para seguir reclamando más y mejores becas para nuestros estudiantes. Como saben, nuestro país invierte en este apartado la tercera parte de la media de los países de la OCDE. Defendemos una universidad y una sociedad en la que nadie sea excluido de la enseñanza superior por motivos económicos.

Cada vez exigimos a nuestros estudiantes una mejor formación y me parece justo si tenemos en cuenta que disponemos de los recursos humanos y materiales mejores de nuestra historia. Entre esas exigencias hay algunas que no existían o se les daba poca importancia cuando nosotros pasamos por las aulas. Me refiero a la necesidad de una mayor experiencia práctica, hablar otros idiomas, tener habilidades para el emprendimiento, moverse con facilidad por otros países o dominar las tecnologías de la información. Todo ello para encontrar un hueco en el mercado laboral de nuestro país que cuenta con una de las mayores tasas de desempleo juvenil del mundo desarrollado. Muchas exigencias y muchas dificultades como para disminuir la duración de las enseñanzas universitarias. Precisamente por estos motivos y por la idiosincrasia de la situación laboral española trabajamos para que los estudiantes permanezcan más tiempo en la universidad y tengan menos dificultades para encontrar un puesto de trabajo que les permita crecer como personas y como profesionales.

La nueva composición de los grupos políticos en el Congreso de los diputados obliga al diálogo y a buscar acuerdos. Tal vez se den las circunstancias para conseguir un pacto de estado en educación, incluida la educación superior. Antes de las elecciones del 20 de diciembre la Conferencia de rectores de las universidades españolas convocó a los cuatro partidos políticos que, según las encuestas, iban a obtener una representación mayor. A todos les planteamos los parámetros por los que debía regirse el sistema universitario español, ahora recogidos en la estrategia aprobada en el Congreso de los diputados. No nos podemos permitir el lujo de cambiar de leyes cada cuatro años y modificar un sistema antes de que termine su implantación, sin poder evaluar sus virtudes y sus defectos. Un pacto de estado para aumentar la calidad de la universidad en todas sus misiones. Un pacto que nos permita ser más útiles, formar mejor a nuestros estudiantes y estar más comprometidos con el progreso de la sociedad.

Es de justicia señalar que tanto desde el ministerio como desde los partidos políticos se cuenta con la opinión de las universidades en la toma de decisiones. No sé cuánto durará esta situación favorable. Acuerdos como los alcanzados en las pruebas de acceso y admisión a la universidad o la próxima regulación de la duración de los títulos de grado y máster son un ejemplo claro. Reiteramos nuestra disposición al diálogo y a aportar nuestras ideas.

No son momentos para mirar a corto plazo sino de elevar la mirada y diseñar un modelo educativo adaptado a las necesidadesde los nuevos tiempos. Como indicaba el singular último premio Nobel de Literatura en su composición “The time they are a changin”: “Nose queden en la puerta, no bloqueen la entrada. Hay una batalla ahí fuera, y hará vibrar vuestras paredes. Admitid que las aguas de vuestro alrededor han crecido. Si el tiempo es para vosotros algo que merece la pena conservar, entonces es mejor que empecéis a nadar u os hundiréis como una piedra, porque los tiempos están cambiando”.

Les deseo que pasen un feliz día.

Muchas gracias por su atención.